Leí este libro el año pasado porque lo recomendó la Cata de Lecturalis,
confío mucho en sus recomendaciones
tenemos gustos afines y un amor especial por los vampiros.
Recuerdo que cuando lo leí me atrapó desde el primer capítulo,
y ahora que hice una relectura me pasó lo mismo, lo leí rápido y lo disfruté.
Está contado en formato de documental, como una entrevista y si bien la estructura puede ser un poco chocante o desalentadora al principio, al final te acostumbras y sigues leyendo porque quieres saber qué pasará con Daisy Jones y The Six.
Con los años 70 de fondo y un montón de drogas y excesos, los personajes se enredan en la historia sobre música, amor, soledad y sufrimiento. Lo que me interesó mucho de este libro, y lo que rescato, es la construcción de los personajes femeninos, estas son las que sostienen la trama.
Camila, Karen, Simone y Daisy, cada una de ellas tiene su propia historia, sus demonios, sueños y son los personajes más fuertes. Camila es como la luz de la historia, es la razón de que Billy no vuelva a caer en sus adicciones, es la que le exige ser una mejor persona y la que mantiene el sueño vivo, Billy se refiere a ella como que “nació contenta”, Camila es todo lo que está bien en el mundo y lucha por sus sueños, es más que la esposa de una estrella de rock, aunque tengo mis reparos en el hecho de que haya decidido permanecer con Billy, él mismo lo dice en el libro “no la merecía”.
Karen es el opuesto de Camila, ella no sueña con una familia o una relación, su carrera está primero y en eso encuentra su motivo, es tremendamente talentosa, pero el mundo en el que se desenvuelve está plagado de hombres y sufre las trabas propias de la discriminación por género, por ende constantemente debe revelarse, en la historia vive momentos difíciles y coloca el debate sobre el derecho a decidir por nuestros propios cuerpos.
Simone es la mejor amiga de Daisy, probablemente la persona que más la quiere en toda la historia, siempre está para ella, incluso en la distancia, hay una cita muy bella donde ella le dice: “Y no importa dónde estemos, no importa la hora que sea, el mundo está oscuro y nosotras somos dos luces parpadeantes que brillan a la luz. Ninguna de las dos brilla sola”, siento que esta frase puede englobar el enfoque que le he dado a esta lectura, me gusta verla con una perspectiva sorora, en que lo más importante y bello a destacar no es el amor romántico, si no que la amistad y amor entre mujeres. La amistad entre Camila y Karen, entre Karen y Daisy, entre Simone y Daisy y finalmente, el apoyo de Camila a Daisy.
El personaje de Daisy se presenta desde el primer momento como alguien roto: “Nos encanta la gente que está rota y es hermosa”, así la describen al comienzo del libro, lo que deja claro cómo es vista Daisy por la mayoría: un objeto, una inspiración, la musa. El viaje de Daisy es sobre encontrarse a sí misma, sanar y enfrentar el trauma de su infancia, dejar de buscar el amor en personas equivocadas y finalmente amarse a sí misma. Su relación con Billy Dunne es compleja y tiene muchas capas, puede analizarse de varias formas, pero no es mi foco principal ni lo que más me interesa rescatar.
Al final del libro llega un punto en que todo está tan podrido que no sabes si la historia podría terminar bien. Hay una búsqueda (por la fama), el deseo (dinero, sexo, drogas), la caída (adicción, autodestrucción), la paz y la pérdida que culmina con todo.
Ya se estrenó la serie en Prime Video, se han lanzado los primeros tres capítulos y no tengo una opinión objetiva porque me encanta Sam Claflin, considero que el cast está perfecto y hasta el momento, veo que la cosa va bien.